Latinos vencen obstáculos y se encaminan a universidades de prestigio
La Iniciativa Académica Vecinal Leslie y William McMorrow de USC gradua a 95 jóvenes que viven en desventaja económica
Llesion Pérez, Elizabeth Méndez y Benjamín Santos se han graduado del programa NAI de USC y se enfilan a la universidad. Crédito: Fotos: Jorge Luis Macías | Impremedia
Los rostros llenos de felicidad de Elizabeth Méndez, Lleison Pérez y Benjamín Santos mostraban el orgullo por haber completado el primer paso académico riguroso que los lleva a la conquista de sus sueños de educación superior en una universidad.
Méndez, hija de padres mexicanos y Pérez y Santos, ambos descendientes de migrantes de Guatemala fueron participes de una ceremonia de graduación para 95 estudiantes jóvenes del programa llamado Iniciativa Académica Vecinal (NAI) Leslie y William McMorrow de la Universidad del Sur de California (USC).

Dicho programa ofrece igualdad de oportunidades para el éxito en la educación superior y más allá a los estudiantes que viven en los vecindarios cercanos a los campus de la USC.
Más de la mitad de los estudiantes graduados de la Iniciativa Académica Vecinal Leslie y William McMorrow de este año se comprometieron con la USC, y otros fueron aceptados en prestigiosas universidades como Stanford, Berkeley, Harvard, John Hopkins y UCLA.
“Siempre me ha gustado mucho la escuela, especialmente las matemáticas y es una maravilla ver lo que puedo hacer en el futuro”, dijo Elizabeth Méndez, de 17 años, quien fue aceptada en UC Berkeley, donde estudiará una carrera de ingeniería mecánica UC Berkeley.
Su madre -recién fallecida- fue quien descubrió NAI y la inscribió en el programa en la escuela Foshay Learning Center, ubicado en el distrito de Exposition Park.
“El programa me cambió la vida”, dijo. “Pero Dios y la fe que me inculcaron mi mamá y mis abuelitos [Misael y Ana] me sacaron adelante, porque solo Dios tiene todas las soluciones a lo que voy y tengo que hacer”.


Desde el sexto grado de primaria, Elizabeth descubrió su pasión por la ingeniería mecánica, mediante lo que podía construir con sus manos y con la mente.
“Todos los jóvenes deberíamos hacer lo que podamos. No importan los obstáculos que se tengan que vencer con tal de lograr nuestro objetivo”, afirmó Elizabeth, quien tiene tres hermanos más pequeños.
Su padre, Joaquín Méndez, un restaurantero oaxaqueño describió que Elizabeth es una niña disciplinada, inteligente y madura en sus pensamientos.
“La fortaleza de su fe es grande”, describió el padre de Elizabeth. “Escogió una excelente carrera, donde no tendrá que depender de nadie, más que de ella misma”.
“USC, un buen vecino”
Kim Thomas Barrios, vicepresidenta senior de Asociaciones Educativas K12 de la USC destacó que lo mejor de la Iniciativa Académica Vecinal (NAI) Leslie y William McMorrow es que catapulta a los estudiantes de primera generación a la universidad “para que tengan una mejor vida”.
“Irán a una universidad y obtendrán un título que les abrirá puertas que antes no se les habían abierto”, reconoció. “Esta ha sido la historia desde que comenzó el programa, porque muchos estudiantes latinos pertenecen a minorías y han estado viviendo en este vecindario [aledaño a USC], peor nunca tuvieron la oportunidad de tener un verdadero camino al éxito”.
El programa de NAI comenzó en 1991 con la primera clase de alumnos que estaban en sexto grado y continuo hasta el grado 12. Fue ratificado por la Junta de Fideicomisarios de USC y la primera clase de graduados ocurrió en 1997.
Desde entonces en el programa de han graduado casi 1700 estudiantes del vecindario alrededor de USC y de escuelas alrededor del campus de Ciencias de la Salud.

“USC siempre ha querido ser un buen vecino. Y ser un buen vecino significa abrir las puertas del éxito al vecindario”, describió Kim Thomas Barrios.
Si bien fueron 95 los estudiantes graduados de preparatoria, en el programa de NAI hay otros 900 estudiantes de sexto al doceavo grado y más de 350 que ya están en la universidad.
Para poder ser parte del programa, la familia del estudiante tendría que vivir en el vecindario local, aproximadamente a una milla alrededor de la universidad de USC y asistir a una de sus escuelas asociadas: Foshay Learning Center, El Sereno Middle School y Nightingale Middle School.
“Hacen cosas maravillosas por el mundo”
Lizeth Zarate, directora del programa Iniciativa Académica Vecinal (NAI) de USC, dijo a La Opinión que. en su misión de guiar a estudiantes desde el quinto grado hasta el grado 12, colabora con más de 30 escuelas elementales.
En sus manos están los sueños y metas de cientos de jóvenes de minorías que desean alcanzar las estrellas con una educación universitaria.

“Los sueños de los niños comienzan con nosotros, que tenemos el compromiso de que lleguen a la universidad; vamos a las escuelas, nos reunimos con los padres, los maestros y los estudiantes, hablándoles de la oportunidad”.
Zarate, quien obtuvo una maestría y un doctorado en educación, también fue parte del programa NAI. Sus padres, originarios de Michoacán, México, no sabían cómo navegar en el sistema educativo, pero su madre, Bertha Aguayo, hizo el descubrimiento que le cambió la vida para siempre. Su padre, Federico, era troquero.
“Los padres más que nada son los que se emocionan porque ellos ven el camino que hay adelante para sus hijos”, manifestó. “Los estudiantes de quinto grado no necesariamente se ven como estudiantes universitarios todavía, pero cuando les decimos ustedes van a ir los sábados a la universidad y van a tomar clases y vamos a hacer actividades, ahí es cuando se emocionan”.
Para ella, celebrar con los estudiantes en la gala de graduación, la transporta a los años donde ella misma comenzó a forjar sus sueños.
“Yo les digo a los estudiantes, me acuerdo de sus caritas cuando los conocí por primera vez, y es muy gratificante saber que somos un pedacito en la historia de ellos, porque, después que se gradúan, van a la universidad y se ahí se forjan nuevas metas y hacen cosas maravillosas por el mundo”.
Aprovechan las oportunidades
Benjamín Santos, de 17 años fue aceptado en 10 universidades de Estados Unidos, pero al final se decidió por USC, donde estudiará una maestría en contabilidad.
Sus padres, Petronila Nicolás y Rolando Matías emigraron a Estados Unidos alrededor de 2005, radicaron en algún barrio cercano a USC, donde -desde pequeño- Benjamín fue inscrito en el exigente régimen de clases matutinas y de fin de semana en los campus de la USC.

“Tengo que agradecer a tanta gente de USC la oportunidad que me brindaron”, dijo el estudiante. “El programa donde estuve se trata de contribuir con otras personas y darles oportunidades, y por eso planeo hacer mis estudios aquí, en USC”.
El joven latino valoró que, en la Iniciativa Académica Vecinal (NAI) Leslie y William McMorrow de la Universidad del Sur de California (USC “el amor entre todos, incluso en comunidades minoritarias, es tan cariñoso, y eso es lo que todos los estudiantes aquí en NAI adoran, así como las oportunidades de existo académico, las pasantías y otros programas extracurriculares de ingeniería, biología y negocios, y muchos más para que puedas aprovecharlo. Eso es lo principal”.
Por su parte, Llesion Pérez, de 18 años, nacido en Estados Unidos, quiere ser motivo de orgullo para sus padres, Elder Giovanni Pérez y su madre, Ada Crista Hernández, originarios de Zacapa, Guatemala.
“Como hijo, quiero darles la satisfacción de que me vean graduarme de la universidad”, dijo el estudiante. “Ellos siempre se esforzaron por darme lo mejor que pudieron y la medalla que recibí del programa NAI es para ellos”.
Lleison proviene de una familia grande. En Los Ángeles vive con su padre y su hermano Anthony. Ambos se dedican a la construcción.
En Guatemala están su mamá, sus otros hermanos y su abuelita. En total, son siete de familia y todos dependen del salario de su padre.
“Mi papá me dice que estudie, porque para eso vino a Estados Unidos, para darnos una mejor vida a todos sus hijos”, expresó Llesion, cuyos planes son estudiar una maestría en contabilidad y trabajar una de las grandes firmas de ese ramo.